Cada día que pasa los fabricantes de impresoras nos sorprenden con mas y mejores impresoras a bajo precio, antes el bajo precio era sinónimo de mala calidad sin embargo ahora esto no es necesariamente cierto, Epson, Canon, Hp y otros cientos de fabricantes hacen esfuerzos enormes día a día para mejorar sus productos, ahora nos entregan impresiones de calidad fotográfica que superan en la mayoría de las veces a las impresiones de laboratorios fotográficos, después de superar la calidad de impresión, la objeción que tenían las fotos de inyección de tinta era su tiempo de vida, pero con los nuevos papeles y tintas que existen en el mercado su durabilidad esta garantizada por lo menos en 50 años expuestas a la luz y si están almacenadas su tiempo de vida se extiende hasta ¡200 años!
No creo vivir lo suficiente para comprobar esto, pero de lo que si estoy seguro es que la impresión de fotografía por emulsión química será en poco tiempo un recurso para profesionales de este arte, abundaran los kioskos con impresoras de chorro ofreciendo rapidez y calidad a un precio razonable, por lo pronto los que somos exigentes en impresiones tenemos la opción de Sistemas de Inyección de Tinta Continua, CISS por sus siglas en ingles, que nos dan enormes satisfacciones a un precio realmente bajo, cada vez son mas los sistemas CISS disponibles para casi todas las marcas de impresoras y va en aumento, por lo que cuesta un kit completo de cartuchos de fabrica se puede comprar un kit CISS que ofrece la misma calidad y sobre todo muchísimas mas impresiones con la posibilidad de solo recargar la tinta que se termino, los fabricantes de sistemas CISS anuncian un ahorro del 95%, esto todavía no lo he podido comprobar pues todavía no me he terminado la tinta que llego con el kit, de lo que si estoy absolutamente seguro es que si usara cartuchos originales ya me hubiera terminado por lo menos 18 cartuchos con las fotos que he imprimido hasta ahora y todavía no veo que los niveles de tinta bajen de manera perceptible en mi kit CISS, definitivamente el proceso fotográfico desde la toma, posproducción e impresión llego hasta la sala de nuestros hogares, o en mi caso, hasta la mesa del comedor que es desde donde hago todo.
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